Guadix, cruce de caminos y culturas milenarias, cuna de arcilla y ciudad de referencia en Andalucía Oriental, guarda un tesoro escondido en las entrañas de la tierra: las CASAS CUEVA. Considerada como la "Capital Europea de las Cuevas" por sus aproximadamente 2000 viviendas subterráneas (repartidas en una superficie aproximada de 200 hectáreas de terreno) , la mayoría de ellas continúan habitadas por unos 4500 accitanos que disfrutan de todas las comodidades de una vivienda moderna y de sus beneficios naturales: temperatura constante entre 18º C - 20ºC y la tranquilidad y silencio que aporta su aislante natural (la arcilla). Los orígenes de las Cuevas hay que buscarlos inmediatamente después de la toma de Granada (1492) por los Reyes Católicos, en el desplazamiento de los moriscos desde la medina a los arrabales y después a la periferia, cuando en 1568 tuvo lugar la Guerra de los Moriscos y la consecuente expulsión de éstos. Formando un arco en sentido este-sur-oeste entorno a la ciudad, las cuevas presentan una planificación anárquica. Excavadas por la mano del hombre gracias a los materiales desmenuzables y fáciles de tallar, secos y muy impermeables de los cerros arcillosos que rodean la ciudad, tradicionalmente eran picadas por maestros alarifes con pico y pala y la técnica consistía en el "picado" del cerro para que este no se derrumbara.
Guadix, cruce de caminos y culturas milenarias, cuna de arcilla y ciudad de referencia en Andalucía Oriental, guarda un tesoro escondido en las entrañas de la tierra: las CASAS CUEVA.
ResponderEliminarConsiderada como la "Capital Europea de las Cuevas" por sus aproximadamente 2000 viviendas subterráneas (repartidas en una superficie aproximada de 200 hectáreas de terreno) , la mayoría de ellas continúan habitadas por unos 4500 accitanos que disfrutan de todas las comodidades de una vivienda moderna y de sus beneficios naturales: temperatura constante entre 18º C - 20ºC y la tranquilidad y silencio que aporta su aislante natural (la arcilla).
Los orígenes de las Cuevas hay que buscarlos inmediatamente después de la toma de Granada (1492) por los Reyes Católicos, en el desplazamiento de los moriscos desde la medina a los arrabales y después a la periferia, cuando en 1568 tuvo lugar la Guerra de los Moriscos y la consecuente expulsión de éstos.
Formando un arco en sentido este-sur-oeste entorno a la ciudad, las cuevas presentan una planificación anárquica. Excavadas por la mano del hombre gracias a los materiales desmenuzables y fáciles de tallar, secos y muy impermeables de los cerros arcillosos que rodean la ciudad, tradicionalmente eran picadas por maestros alarifes con pico y pala y la técnica consistía en el "picado" del cerro para que este no se derrumbara.